Si nosotros somos lo que comemos, entonces nuestro cerebro, también lo es. Aunque representa un 2% de nuestro peso, necesita un 20 % de la energía que ingerimos y esa energía la obtenemos de los alimentos que consumimos. Por lo que podemos mejorar la salud y funciones de este órgano a través de la alimentación.
El cerebro está compuesto por una maraña de celulas nerviosas, neuronas y cables eléctricos, interconectados por sustancias químicas simples, cuyo objetivo principal, es la transmisión de mensajes de una célula nerviosa a otra. Trabaja de forma activa, incluso cuando dormimos. El cerebro es el responsable del aprendizaje, la cognición, las emociones y la memoria.
Una de las principales fuentes de energía del cerebro, es la glucosa. La glucosa está presente en alimentos que típicamente, contienen almidón (arroz, pasta, pan y papas), además de las frutas, los jugos, la miel, el azúcar, las mermeladas. El cuerpo toma los carbohidratos digeribles presente en estos alimentos y los transforma en glucosa, que es transportada por el torrente sanguíneo hasta el cerebro y otros órganos para aportarles la energía que necesitan para poder funcionar de forma correcta.
Además de los carbohidratos, el cerebro necesita de nutrientes esenciales presentes en: verduras, vitaminas, minerales, ácidos grasos y proteínas. Un exceso o una falta del nutriente necesario, puede afectar al sistema nervioso.
¿Qué sucede en el cerebro si existe una alimentación desequilibrada?
Ante la carencia de nutrientes, producida por el desequilibrio de la alimentación, pueden surgir síntomas, tales como: nerviosismo, falta de atención, de memoria, de concentración, depresión, cansancio, irritabilidad, desgano, apatía, ansiedad, neurosis, falta de sueño.
Por lo tanto, si deseas mantener tu cerebro en buena forma, toma nota de los alimentos que debes consumir para mantener una alimentación equilibrada.
Alimentos aliados al buen funcionamiento de nuestro cerebro.
Si nuestro objetivo es mantener en buen estado nuestra capacidad intelectual, debemos ayudarnos con una buena dieta y seguir los siguientes consejos:
a) Debes consumir alimentos ricos en proteínas, ya que éstas son esenciales para la fabricación de los neurotransmisores, esenciales en los procesos cerebrales. Sería deseable, que la comida del mediodía, sea la más rica en proteínas, de forma a optimizar la mente y poder mantenerte alerta en la tarde.
b) Dar prioridad a los vegetales ricos en antioxidantes y vitaminas: Es decir, debemos suministrar a nuestro cuerpo, altas dosis de Vitaminas A, B, D y E, (brócoli, pimientos, zanahorias, espárragos, espinacas, hongos, calabacín y en su mayoría los vegetales de colores vivos deben tener el rol principal en nuestro plato de comida). También debemos incluir en nuestra dieta los ácidos grasos de Ómega-3 (pescados de aguas profundas, huevos, entre otros).
c) Para ayudar a mantener el cuerpo hidratado y el cerebro funcionando de forma óptima, bebe de 1,5 a 2 litros de agua al día.
d) Para oxigenar el cerebro, son importantes la práctica de ejercicio y el consumo de comidas ligeras y frecuentes.
e) No olvides los carbohidratos, sin abusar de ellos. Recuerda que de ellos, el cerebro obtiene una de las fuentes de energía más importantes para su funcionamiento.
Alimentos que perjudican nuestro cerebro
Las grasas saturadas y las grasas trans, dañan las funciones intelectuales. Producen un efecto negativo en la memoria, disminuye la capacidad de reflexión, de aprendizaje y empeora la expresión oral del individuo que las consume. Por lo tanto, deberás:
a) Disminuir el consumo de grasas saturadas (grasas malas): Estas provienen de productos animales, tales como: mantequilla, leche entera, queso crema, carnes grasosas, helado. También las encontramos en aceites vegetales, tales como: el de palma, palmiche, de coco. (Estas son grasas sólidas a temperatura ambiente).
b) Disminuir el consumo de grasas trans: Este tipo de grasas las encontramos en alimentos elaborados de forma industrial, por lo que están presentes en snacks salados y aperitivos como: papas fritas, palitos, galletas, pizzas, margarinas, barritas de cereales, hamburguesas, empanadas, productos precocidos, entre muchos otros.
¿Qué hacer para mantener nuestro cerebro en buena forma?
Al comer de la forma adecuada, nuestros estado de ánimo mejorará, así como nuestra memoria, capacidad de concentración y velocidad de pensamiento.
El hecho de que seas una persona con estudios, que desempeña un trabajo complejo, no disminuye el riesgo de que puedas sufrir problemas de memoria a medida que envejeces. Ni te ofrece ventaja sobre aquellas personas que apenas han estudiado.
Por lo tanto, no importa lo que fuiste en el pasado, lo realmente importante para conservar tus facultades intelectuales en buena forma hasta bien entrados en años, es el haber cuidado tu alimentación. Sumado a esto, si te mantienes activo social, física y mentalmente, estarás evitando o en su defecto, retrasando el deterioro de tu cerebro.
Según expertos en el tema, nuestro estilo de vida y los factores ambientales, son los que nos permiten mantener nuestras funciones cognitivas intactas. Permitiéndonos mantener un alto rendimiento intelectual.
En conclusión para continuar teniendo funciones cerebrales activas, huye del sofá, olvídate de picar cualquier cosa, come sano, realiza actividades que te generen retos diarios y que te ayuden a mantener tu cerebro en forma.
Fuente:
- Ecuador
Deja tu comentario
Debe iniciar sesión para escribir un comentario.