y logra el maquillaje perfecto.
La premisa para darle a tu rostro un look natural es la de: “Menos es más”. Esto quiere decir que, es importante ser cuidadosa con la cantidad de maquillaje que le aplicarás a tu rostro, debido a que los excesos terminarán por darte un resultado artificial, muy lejos del look natural que probablemente estás buscando.
Pasos claves antes de iniciar tu maquillaje:
1.- Antes de iniciar tu rutina diaria de maquillaje, recuerda que es muy importante, limpiar muy bien la piel de tu rostro. Es una buena ocasión para activar la circulación de la sangre en esta área de tu piel. Aplica una crema o leche limpiadora adecuada a tu tipo de piel, haciendo movimientos circulares y valiendote de la punta de tus dedos, algodón o esponjas especiales.
Recuerda, cada semana, hacerte un exfoliación para deshacerte de las células muertas y darle a la piel de tu rostro una apariencia más luminosa y fresca.
2.- Tonifica tu piel. Luego de retirar las impurezas de tu rostro, deberás aplicar un tónico que te ayudará a cerrar los poros, te ayudará a mantener el PH neutro de tu piel y aportará frescura a tu cutis. Inclínate por los tónicos que no poseen alcohol entre sus ingredientes, ya que el alcohol puede resecar tu piel y otorgarle un aspecto opaco.
3.– Hidrata tu piel. Una buena hidratación hará que tu piel luzca más descansada y joven, por lo que este paso es uno de los más importantes. También permitirá que el maquillaje luzca mejor y dure más tiempo. Cerciórate de escoger la crema hidratante que mejor se adecúe a tu tipo de piel.
4.- No olvides el protector solar, cuyo factor de protección no deberá ser menor de 50.
5.- Por último, aplica un primer, cuya función será otorgarle un aspecto uniforme y suave a tu piel, disminuir la grasa de tu rostro, cerrar los poros y fijar el maquillaje por más tiempo.
Ha llegado la hora de aplicar el maquillaje a tu piel, en este sentido, el tipo de maquillaje y los productos que utilizarás dependerán mucho de lo que quieres como resultado final. Sin embargo, un corrector, una buena base, un rímel y el lápiz labial, serán los productos esenciales que te permitirán lograr ese aspecto fresco y saludable que estás buscando.
Para maquillajes más sofisticados, necesitarás un iluminador, sombras de colores para los ojos y un delineador.
6 pasos esenciales para un maquillaje perfecto
1.- Aplicar el corrector. Este producto es indispensable si deseas disimular ojeras, cicatrices, u otras imperfecciones del rostro. Bien sea en la presentación de lápiz, stick o crema, opta por la textura que mejor se adecúe a tu tipo de piel.
En el caso de las ojeras, comienza por aplicar una crema para el contorno de los ojos, lo que permitirá que el corrector deslice mejor. Usando un pincel adecuado para este paso, o recurriendo a la punta de tus propios dedos, aplica el corrector (siempre en pequeñas cantidades), con toques suaves, hasta que se comience a fundir con la piel y prácticamente no se note.
2.- Aplicar la Base. Para el caso de pieles secas y con algunas líneas de expresión, opta por una base líquida, ya que tienden a poseer hidratantes que compensan la sequedad del rostro.
Para las pieles grasas o mixtas, deberás recurrir a una base en polvo, que le otorgará a tu piel un aspecto mate, sin brillo, camuflando de esta forma la oleosidad.
La aplicación de la base deberá realizarse con la ayuda de un pincel adecuado para este propósito o usando la punta de tus dedos. Comienza colocando pequeñas cantidades en el rostro y en el cuello, para posteriormente irlas difuminando de dentro hacia afuera. La palabra de orden será difuminar, hasta que la base se funda con la piel y deje de notarse.
Con relación al tono que deberás usar, lo ideal es experimentar dos o tres tonos diferentes. Aplica un trazo de cada uno de ellos en la curva de la quijada y luego observa el efecto que se produce al colocarte bajo la luz natural. La base que se desaparece será la más indicada para ti.
Si lo que quieres es lograr un look super natural, mezcla un poco de la base con tu crema hidratante y esparcela por tu rostro.
3.- Sombras y delineador. En lo que a ojos se refiere, no existen colores prohibidos. Las mujeres morenas con ojos castaños, deben optar por sombras con tonos tierra y marrones de tonos medios. Para los ojos verdes, podrá optarse por los tonos violeta, ciruela o rosado. Para los ojos azules, serán ideales las sombras con colores cobre y amarillo dorado. Las rubias se beneficiarán con los tonos beige o grises y las pelirrojas con tonos verde musgo y marrones.
Si deseas realzar tus ojos, usa sombra blanca en el párpado superior, por debajo de las cejas, en la parte externa.
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4.- Rímel. Comienza por aplicar el rímel junto a la raíz de las pestañas, para luego ir subiendo con un movimiento ondulante hasta el tope. Deja que esta primera aplicación seque y repites el mismo procedimiento.
Para un efecto más natural, separa las pestañas con la ayuda de un peine especial para tal fin y aplica el rímel sólo en las pestañas superiores.
Para evitar que se formen grumos, limpia los excesos de máscara del cepillo del rímel, con un poco de papel, antes de comenzar la aplicación.
Para una mirada más intensa, opta por un rímel negro. Si lo que quieres es un efecto más natural, entonces usa un rímel marrón.
Si el rímel se encuentra algo seco, colócale algunas gotas de suero fisiológico. De esta forma, podrás usarlo por mucho más tiempo.
5.- Aplicar el Blush. En polvo, crema o gel, la elección es tuya. Lo que sí debes saber es que el blush en polvo confiere un aspecto más mate, mientras que, tanto el gel como la crema, te otorgarán un aire más fresco y natural.
Opta por los tonos rosados, que permiten dar un aire más colorado, pero natural y aplícalo con un pincel en el caso de las presentaciones en polvo, o con la punta de tus dedos en las presentaciones en crema o en gel. Otras tonalidades que podrás usar serán, los tonos beige, vainilla, melocotón y colores tierra (siempre exentos de brillo).
Para una aplicación adecuada, sonríe de forma forzada. Esto hará que se levante tu pómulo. Será allí en donde deberás aplicar el blush. Siempre de dentro hacia afuera, en forma horizontal.
Para finalizar, coloca un poco de blush en la barbilla, punta de la nariz y contorno de los ojos.
6.– Aplicar el Labial. Para unos labios irresistibles, deberás hidratarlos y exfoliarlos de manera regular.
Durante el día, opta por un gloss de labios con color natural o un labial en tonos nude o rosa mate. Para la noche, o en el caso de que requieras de un maquillaje más sofisticado opta por un labial de colores fuertes, tales como el rojo, vinotinto o naranja, o por el color que esté de moda.
Con los labios en tonos claros, la atención se concentrará en la mirada, por lo que en este caso, los colores de las sombras deberán ser más fuertes, o visceversa.
Para que el labial dure más tiempo, luego de la primera aplicación, “muerde” una servilleta, para retirar el exceso, aplica una ligera capa de polvo compacto y termina colocando otra capa de labial.
Debes tener en consideración que la utilización de los pinceles adecuados para la aplicación del maquillaje, te garantizará un resultado perfecto.
Si sigues estas sugerencias, lo que obtendrás será un maquillaje natural, que resaltará la belleza de tu rostro y disimulará sus imperfecciones.
¡Anímate a seguir estos consejos y luego, cuéntanos cómo te ha ido!
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