Día de San Valentín, de los enamorados, del amor y la amistad. Muchos nombres distintos, pero todos para festejar El Amor.

 

Pero ¿qué es el amor? El amor es mucho más que un sentimiento pasajero; el amor bien entendido nos convierte en mejores personas.

Vamos por partes:

Primero hay que decir que hay tipos de amor. No es igual el amor por los padres, por los hermanos, por los amigos,  por el perro, el gato, por los hijos o por la pareja. Sin duda todos ellos son amor, pero cada uno con sus diferentes expresiones, implicaciones, relaciones y responsabilidades.

Para mantener el tono romántico del mes febrero vamos a quedarnos por esta vez en el amor entre hombre y mujer, de pareja, de esposos.

Este amor tiene grados, se asemeja a un fruto que necesita de un proceso para madurar y ser verdaderamente sabroso. Es un guiso de cocción lenta y no tiene nada que ver con una comida rápida; eso es otra cosa.

Primer grado el flechazo, esa soledad de a dos que nos envuelve y no nos deja hacer nada más que pensar en el amado. Esta etapa es maravillosa, necesaria, pero pasajera. No puede, ni debe durar eternamente, el amor es tan grande que necesita expandirse, seguir creciendo y pasar a otro nivel, pero mantiene detalles de esta primera etapa y es aquí donde el Día de San Valentín calza perfecto: flores, bombones, serenatas, tarjetas, frases del corazón, piropos, citas, cenas y un larga lista de etc. (ojalá todo el año y no sólo el 14 de febrero…)

El segundo grado es el Enamoramiento, ya pasamos del me gusta al le quiero.

Aquí es donde debemos pasar mucho tiempo juntos y hablar, hablar, hablar, hablar; de todo. Conocerse y saber si realmente Cupido ha acertado y somos el uno para el otro.  Si en esta etapa nos conocemos bien y decidimos pasar a la siguiente nos evitamos muchos problemas posteriores ya que no habrá sorpresas. Si aquí descubrimos que no es él o la indicada, pues no pasa nada, tocará seguir esperando otro flechazo y vuelta a empezar.

El tercer grado y el más profundo es el tener claro que el amor no es puro sentimiento, es VOLUNTAD, es la etapa del querer querer. Ya mi corazón está conquistado, mi alma, mi cuerpo y mi voluntad se involucran y conscientemente pongo todo de mi parte para querer al otro. Día a  día con cabeza en la relación luchando por ella, porque le quiero, pero más importante aún porque he decidido quererle con todo y a pesar de todo.

Este proceso toma tiempo y en este último se profundiza cada día, pero vale la pena y si se descubre este amor y se vive nos convertimos en mejores personas ya que se da y se recibe, ya no  se es una sino una unidad de dos.

  • En fin, lo más importante es que el amor es maravilloso y cuando se encuentra hay que cuidarlo, hacerlo crecer y disfrutarlo todos los días aunque con un poco más de énfasis el 14 de febrero, mal que mal ese día “love is in the air”.

  • Argentina