¿Estamos preparadas para enfrentar y asumir los CAMBIOS de manera positiva?
Es un hecho que vivimos en un entorno de permanente CAMBIO.
El mundo está en continuo movimiento. Hay cambios climáticos provocados por las decisiones que nosotros, como humanidad estamos tomando diariamente y que afectan nuestro planeta.
La tecnología ha y seguirá revolucionando la forma como nos comunicamos, la manera como compramos, la forma como hacemos negocios, como aprendemos y como nos relacionamos con las personas.
La globalización cada vez demanda de las personas, mayor capacidad de adaptabilidad para trabajar y vivir en países diferentes, climas diferentes, con idiomas diferentes y costumbres diferentes.
Por otro lado, en nuestras familias también estamos viviendo CAMBIOS.
Nuestras relaciones de pareja están siendo afectadas y alteradas por una serie de factores como la edad, la situación y presiones laborales, la situación económica de la familia, el crecimiento de los hijos, la falta de tiempo para convivir con la pareja y con la familia, etc., etc.
Nosotras hemos ya pasado de ser mamás jóvenes con hijos pequeños, cuya vida y actividades giraban alrededor de nosotras, a ser mamás maduras con hijos adolescentes y jóvenes que están creciendo y con este crecimiento, están desarrollando sus propias alas para volar y volverse seres independientes. Ya no nos necesitan como antes. Sus cambios, tanto de ánimo, como de intereses, como en sus ambientes sociales, definitivamente nos ESTAN MOVIENDO EL TAPETE. La “partida del nido” se acerca cada día…..
Simultáneamente a todos estos CAMBIOS que se están dando en el mundo, en nuestras relaciones de pareja, con nuestros hijos, NOSOTRAS MISMAS estamos enfrentando CAMBIOS físicos, emocionales, intelectuales y espirituales.
Muchas de nosotras estamos atravesando “nuestra segunda adolescencia”. Nos estamos replanteando quiénes SOMOS, hacia DÓNDE nos dirigimos, QUÉ queremos HACER con nuestras vidas, si estamos o no satisfechas con nuestras parejas, si nos gustan y si queremos continuar con los “roles de vida” que hemos venido teniendo por años, o si queremos hacer algo diferente hacia adelante…..en fin, cambios y más cambios……
MUCHOS CAMBIOS , ¿Verdad?
Pero,¿ los CAMBIOS son BUENOS o MALOS?
Pues yo creo que los CAMBIOS son un HECHO. Y depende de nuestra PERCEPCION y de nuestra ACTITUD para asumirlos como algo POSITIVO o como algo NEGATIVO.
Pienso que los SISTEMAS DE CREENCIAS con los que crecimos nos han influido para ser personas abiertas o cerradas a los cambios, adaptables o inadaptables……
Si los CAMBIOS nos generan MIEDO, normalmente nos cerraremos y tenderemos a ser inadaptables y los sufriremos.
Si asumimos que los CAMBIOS son NORMALES y continuos, los enfrentaremos sin temor y nuestra capacidad para adaptarnos será mayor.
Aquí está la BUENA NOTICIA.
Tu decides como enfrentas los CAMBIOS. Para ello, necesitas conocer QUIÉN ERES y CUÁLES SON TUS CREENCIAS. Tu tienes la opción de retar, analizar y cambiar tus creencias para eliminar las “creencias limitantes” que tienes y que te impiden enfrentar y asumir los cambios con apertura y positivismo.
Te doy un ejemplo. Si tu creciste con la idea de que “tus hijos se irán de casa hasta que se casen y por lo tanto vivirán en tu casa y estudiarán en tu ciudad”, seguramente sufrirás terriblemente si tus hijos deciden no casarse y se van de tu casa al terminar sus estudios o antes, si deciden estudiar o vivir en el extranjero.
Aquí, por ejemplo podemos tener creencias limitantes como que “nuestra felicidad depende de tener a nuestros hijos viviendo en casa y estudiando en el lugar en donde vivimos” porque “eso hace a las familias unidas o sentimos que no están listos para vivir de manera independiente y asumir sus vidas”.
La realidad de las cosas es que el mundo y la educación se globalizaron. Las oportunidades de educación y profesionales se han abierto y con ellas, los intereses de nuestros hijos por volar y encontrar su camino en donde encuentren las oportunidades para desarrollarse. Hoy muchos jóvenes no saben si quieren o no casarse y definitivamente, nuestra felicidad no puede depender de ello.
Otro ejemplo. Tu puedes haber crecido con la idea de que “con la edad, tu tienes menos oportunidades de aprender o desarrollarte profesionalmente” o que “el envejecer, necesariamente conlleva a las enfermedades”.
Por supuesto, si tu creciste con la idea de que el ENVEJECER no trae nada bueno, tienes por lo tanto, no sólo MIEDO sino TERROR a ENVEJECER porque la “edad te limitará en tus oportunidades de crecimiento y desarrollo” y “además seguramente vendrán una serie de enfermedades horribles que te llevarán a tener una pésima calidad de vida”.
Y así, puedo seguir buscando ejemplos reales de las MUCHÍSIMAS CREENCIAS LIMITANTES que venimos arrastrando y que nos llenan de TEMOR y nos impiden asumir los cambios y enfrentarlos con el positivismo requerido.
La BUENA NOTICIA, como lo comentamos anteriormente es que NOSOTRAS tenemos en nuestras manos la oportunidad y yo diría la responsabilidad de “voltear a vernos a nosotras mismas” para realmente CONOCERNOS y definir quiénes somos, en qué creemos y así FILTRAR HOY todos los SISTEMAS DE CREENCIAS con los que crecimos y eliminar todos aquéllos que sentimos LIMITANTES y que en nuestra REALIDAD ACTUAL y FUTURA ya no resuenan con nosotras y nos están impidiendo afrontar los CAMBIOS que estamos viviendo, con una buena ACTITUD, con FLUIDEZ y con POSITIVISMO.
Tu no puedes frenar o impedir los CAMBIOS del mundo, de tu entorno, de tu familia o de tus hijos. Tu sólo puedes CAMBIAR la manera como TU ASUMES LOS CAMBIOS.
Atrévete a CAMBIAR. Atrévete a REINVENTARTE.
- México
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